sábado, 26 de abril de 2014

Ropa chapucera, pero limpia

Muchas personas me han preguntado por qué coso ropa, si se pueden encontrar cosas muy monas en cualquier tienda por cuatro euros.

En efecto, me cuesta mucho más la tela y el tiempo que invierto que esos cuatro euros o precios archi rebajados.

Además, no coso bien. He sido absolutamente autodidacta, con lo que realmente carezco de algunas bases, todo lo he aprendido mirando tutoriales por internet. Y soy chapucera. Muchas veces hago las cosas de cualquier manera, y por precipitarme al final tengo que acabar descosiendo todo y volviendo a empezar. Realmente creo que la costura no es lo mío. Hay gente muy mañosa, hábil con este tipo de actividades manuales... no es mi caso. Pero mi cabezonería es superior a mi gran torpeza, y al final, aunque tarde mucho más que otras personas, lo acabo terminando todo.

Tampoco tengo mucho tiempo. Entre el trabajo y las nenas, coso cuando puedo, a veces ni siquiera disfruto porque estoy más preocupada por acabar en la escasa hora de la que dispongo que por disfrutar y aprender en el proceso.

¿Por qué coso entonces, si se me da mal, no tengo tiempo, me sale caro, y encima me cabreo conmigo misma muchas veces?

Coso por ética. Ni más ni menos. Efectivamente, la ropa es muy barata hoy en día. ¿A qué precio? El precio de las tiendas no es real.

Lo que se compra es trabajo esclavo. Infantil, muchas veces.
Lo que se compra son condiciones infrahumanas.
Lo que se compra son salarios irrisorios.
Lo que se compra son jornadas de trabajo vergonzosas.
Lo que se compra son accidentes terribles, como el de Bangladesh... pero aquí no pasa nada.
Lo que se compra son productos hechos todos en países lejanos, cuyas desgracias "no nos afectan", y así seguimos con nuestras vidas como si nada.
Lo que se compra es "externalización", eufemismo absurdo para decir que ellos producen por diez céntimos y se hacen millonarios a costa de la explotación más absoluta.



Quizás hoy en día sólo llego a realizar una prenda de cada cinco, pero ya es algo. El resto de prendas, siempre pienso mucho si comprarlas o no, si hacen falta o no (a mí misma no me compro casi nunca nada... ¿para qué, si ya tengo mucha ropa y me sigue valiendo?), si son imprescindibles o no. Y si algún día consigo mejorar en mi patético nivel de costura, y/o dispongo de más tiempo, quiero aumentar esa ratio y conseguir por lo menos realizar la mitad de la ropa.

Porque me sale más caro, porque tardo más tiempo, porque es ropa "casera" y no cosida con máquinas industriales... pero está realizada de un modo mucho más ético, y desde luego con mucho cariño.

Para más información: Guía para vestir sin trabajo esclavo.

martes, 8 de abril de 2014

"Si los mataderos tuvieran paredes de cristal, todos seríamos vegetarianos"


¿Y por qué si lo vemos sí nos afecta? ¿Si nos saltamos el proceso de en medio es menos terrible? ¿Ojos que no ven, corazón que no siente?

El mirar a otro lado nos hace cómplices, siempre.

Me gusta mucho esta broma, porque hace reflexionar sobre algo que no tiene ni pizca de gracia.